Golpe frío.
De realidad.
Alivio.
En el centro de la noche.
Se cierra el telón.
Espacio hecho para que los escritores puedan dar a conocer sus obras.
Fuiste tregua en un tiempo de guerra,
fuiste un triple sobre la bocina,
la voltereta perfecta sobre la pared de la piscina en la carrera soñada.
Fuiste un aguacero en el bochorno del verano,
un cigarro compartido en la soledad de mi patio,
la hoja en blanco que se posa sobre un mal poema diéndome: vamos, puedes hacerlo mejor.
Fuiste la derrota de mi vida que se colgaba todas las medallas.
La directora de una obra de teatro en la que me vi protagonista cuando antes sólo era un extraño.
Fuiste un selfie al límite de la colina,
fuimos un amor de altos vuelos,
en un cielo con un techo demasiado bajo.
Por un tiempo fuimos muy grandes en un mundo que quizá, nos quedaba demasiado pequeño. Sólo el tiempo nos lo dirá, pero a veces tengo la sensación de lo único que tiene cabida en mi mente, es tu recuerdo.
# Redescubriendo mi mundo, contigo
# Ricardo Marcos
Hasta que llegaste tú siempre creí que el azul del cielo no tenía matices,
que las calles de mi barrio carecían de magia,
que en las sombras sólo se escondían cosas malas,
que los menús individuales siempre eran para uno,
que los parques eran para los niños y los perros,
que los programas de cocina eran aburridos,
que siempre escribiría poesía sólo.
Y luego llegaste tú,
dispuesta a redescubrir mi mundo.
Me enseñaste a apreciar los grises del cielo y a jugar con sus nubes;
a ver cómo entre las calles de mi barrio se escondía otro mundo más agradable en el que jugar al baloncesto juntos entre canastas y risas fugaces;
me enseñaste que entre las sombras también hay luz y que siempre están dispuestas a contarte un secreto si les juras fidelidad;
que un menú individual siempre llena si el poste lo pones tú;
que los parques son el lugar perfecto para dos enamorados, un lugar en el que sentirse niño y adulto al mismo tiempo;
que los programas de cocina son muy entretenidos, tumbados en el sofá con una copa de vino en la mano y tus audaces comentarios de suficiencia culinaria provocándonos la risa que ahora llena el salón.
Y como te digo, siempre pensé que escribiría poesía sólo,
pero ahora es pensar en ti y pareciera que el folio se llenará de versos sin darme cuenta y casi, sin mi permiso.