Y te volaste,
que digo volar,
te desvaneciste;
como se desvanece una cometa
en pleno huracán.
Su piel,
el huracán:
ese insaciable torbellino de sensaciones.
Y la cometa,
esa parte de ti
que se perdió para no volver jamás.
Ricardo Marcos.
De mi blog: www.ricardomarcos.wordpress.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario