Maltrecho
en el lecho de esta guerra,
absurda guerra
de miradas evasivas
uno del otro.
Muerto de miedo
en aquesta trinchera
en la que me encuentro
solitario
y completamente derrotado,
con temor a perder
más partes de mí,
aunque pocas quedan ya.
Ante ti,
en esos cara a cara,
me encuentro armado
con lápiz y papel
y mis ya inútiles versos.
Tan solo quiero morderte
en tu tersa yugular
hasta oírte gritar
tus mil y un orgasmos.
Abatido de un tiro
como un solo guiño
de esos ojos profundos.
Derrotado,
tirado en el suelo,
agonizando
y pidiendo clemencia a la muerte
para que termine ya
con este trabajo a medias.
Protegeré
mi corazón como nación,
y mi frontera en tus labios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario